¿Por qué los aviones dejan esas líneas blancas en el cielo?

Las líneas blancas que ves detrás de los aviones se llaman estelas de condensación o contrails (del inglés “condensation trails”). Contrario a lo que muchas personas creen, no son químicos tóxicos, sino simplemente agua congelada.

El Proceso Científico de Formación

El fenómeno ocurre por un contraste extremo de temperaturas. Cuando los motores de un avión queman queroseno, los gases que expulsan están a una temperatura muy elevada. Sin embargo, a la altitud típica de crucero (entre 10,000 y 13,000 metros), la temperatura exterior es de aproximadamente -50 grados Celsius.​​

Este brusco cambio de temperatura causa que el vapor de agua presente en los gases del motor se condense inmediatamente, transformándose en pequeñas gotitas de agua que luego se congelan en cristales de hielo. El proceso es idéntico al vaho que ves cuando expiras aire caliente en un día muy frío.

Factores que Contribuyen a la Formación

Además del contraste térmico, existen otros elementos cruciales:

Partículas de condensación: Los residuos de la combustión, incluyendo hollín y micropartículas metálicas, actúan como núcleos de condensación. Las gotitas de agua se forman alrededor de estas partículas, facilitando la formación y mantenimiento de la estela.​

Expansión del gas: Dentro del motor, las moléculas de aire están comprimidas bajo alta presión. Al salir al exterior, el gas se expande rápidamente, lo que provoca una caída adicional de temperatura que acelera la condensación.

Humedad atmosférica: La cantidad de humedad presente en el aire a esa altitud es determinante. Si el aire está muy seco, la estela desaparece rápidamente; si está húmedo, puede persistir durante horas.​

Tipos de Estelas

No todas las estelas se comportan igual. Existen varios tipos según las condiciones atmosféricas:

Estelas pasajeras: Desaparecen rápidamente después del paso del avión, típicamente en cuestión de minutos. Ocurren cuando la atmósfera tiene baja humedad, y los cristales de hielo se subliman (pasan directamente del estado sólido al gaseoso) antes de poder formar una línea persistente.

Estelas persistentes que se expanden: Permanecen en el cielo y aumentan de tamaño con el tiempo. Esto sucede cuando la humedad atmosférica está cerca del nivel de saturación, permitiendo que más vapor de agua atmosférico se condense alrededor de los cristales de hielo de la estela.

Estelas persistentes que no se expanden: Duran horas sin cambiar significativamente de tamaño, típicamente en condiciones de muy alta humedad atmosférica.

Un Fenómeno Poco Conocido: Nubes Prandtl-Glauert

Existe un tipo raro de nube de condensación que no tiene forma de estela. Cuando un avión supera la velocidad del sonido, se produce una variación extrema de presión que causa una condensación instantánea. Esta nube toma forma de disco o cono de muy poca altura y solo se ha observado en cazas de combate y trasbordadores espaciales.​

Las Estelas Como Indicador Meteorológico

Los meteorólogos utilizan las estelas como herramientas para comprender las condiciones atmosféricas:

Estela tenue y corta duración → Indica baja humedad a gran altitud → Señal de buen tiempo.​

Estela gruesa y duradera → Indica alta humedad a gran altitud → Posible indicador temprano de tormentas o cambios climáticos.​

Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), las estelas persistentes tienen relevancia en la predicción del clima a largo plazo. Un informe de 1999 del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC) confirmó una correlación entre el aumento de nubes cirros (tipos de nubes donde se forman las estelas) y las emisiones de aeronaves.

¿Afectan las Estelas al Clima?

Existe evidencia científica de que las estelas sí tienen impacto climático, aunque de forma limitada. Tras los ataques del 11 de septiembre de 2001, cuando se suspendieron todos los vuelos comerciales en Estados Unidos durante tres días, científicos de las Universidades de Wisconsin y Pensilvania analizaron los datos meteorológicos.​

Descubrieron que sin tráfico aéreo, la diferencia de temperatura entre el día y la noche era mayor que durante los períodos normales de vuelo. Una posible explicación es que las estelas actúan como una manta térmica, reteniendo radiación infrarroja durante la noche y reduciendo la radiación solar durante el día, lo que modera las fluctuaciones de temperatura.​​

Las estimaciones sugieren que el tráfico aéreo y sus estelas asociadas contribuyen aproximadamente el 3.5% del impacto total de todas las actividades humanas en el cambio climático.

Desmitificando las Teorías de Conspiración

A pesar de la explicación científica clara, existen teorías de conspiración que denominan estas estelas como “estelas químicas” o “chemtrails”, sugiriendo que son parte de un plan secreto de geoingeniería o envenenamiento poblacional. Estas teorías carecen de base científica.

Las estelas de condensación son simplemente vapor de agua congelada, un fenómeno natural que ocurre desde que existen los aviones comerciales. Los científicos tienen acceso transparente a los datos de composición de combustibles de aviación, regulados por estándares internacionales, lo que hace imposible un programa secreto de dispersión química a gran escala.

Lo próximo que veas esas líneas blancas en el cielo, sabrás que no es más que el resultado de la física básica: agua del aire caliente del motor transformándose en hielo al encontrarse con la atmósfera extremadamente fría a 10 kilómetros de altitud. Es un fenómeno hermoso que, además, sirve como indicador natural de las condiciones meteorológicas superiores.